Yo soy partidario de lo público, creo en la sanidad pública, en la educación pública y por supuesto en los medios de comunicación públicos.
Días pasados en la 1 de TVE, en uno de esos programas de reporteros, echaron un reportaje sobre la vida en determinados barrios humildes de Madrid y Barcelona.El enfoque que dieron en Barcelona fué el de ver el barrio en cuestión (podría ser cualquiera de una ciudad cualquiera) a través de los ojos de alguno de sus moradores, casi siempre gente amable que nos daban una visión totalmente diferente a la que podríamos haber recibido sólo con las imagenes o con entrevistas vacias y de poco tiempo a quienes allí habitan.
En Barcelona la protagonista fué Victoria, una veterana cooperante con los afectados por drogadicciones varias. Fué un lujo ver como paseaba por un barrio donde muchos tendrían miedo (prostitutas, camellos) y mejor con que alegría desarrollaba su labor de voluntariado en un piso de acogida donde era más que una madre para los que por allí iban pasando.
"Llegó la alegría", "Es un ángel para nosotros", fueron algunas de las frases que Victoria recibió al llegar al piso donde cada día dedica varias horas de su vida a convivir con gente que según ella siempre merecen una nueva oportunidad. La mirada limpia y el alma pura de Victoria nos hizo recorrer un barrio, lleno de miseria no nos engañemos, tanto humana como urbanistica, viendo a la vez el valor de esas personas a las que negamos todo y la riqueza de una vida entregada a ayudar desinterasadamente a los otros que te necesitan.
Me encantó el enfoque periodistico y también descubrir que grande es la vida con gente como ella.
Días pasados en la 1 de TVE, en uno de esos programas de reporteros, echaron un reportaje sobre la vida en determinados barrios humildes de Madrid y Barcelona.El enfoque que dieron en Barcelona fué el de ver el barrio en cuestión (podría ser cualquiera de una ciudad cualquiera) a través de los ojos de alguno de sus moradores, casi siempre gente amable que nos daban una visión totalmente diferente a la que podríamos haber recibido sólo con las imagenes o con entrevistas vacias y de poco tiempo a quienes allí habitan.
En Barcelona la protagonista fué Victoria, una veterana cooperante con los afectados por drogadicciones varias. Fué un lujo ver como paseaba por un barrio donde muchos tendrían miedo (prostitutas, camellos) y mejor con que alegría desarrollaba su labor de voluntariado en un piso de acogida donde era más que una madre para los que por allí iban pasando.
"Llegó la alegría", "Es un ángel para nosotros", fueron algunas de las frases que Victoria recibió al llegar al piso donde cada día dedica varias horas de su vida a convivir con gente que según ella siempre merecen una nueva oportunidad. La mirada limpia y el alma pura de Victoria nos hizo recorrer un barrio, lleno de miseria no nos engañemos, tanto humana como urbanistica, viendo a la vez el valor de esas personas a las que negamos todo y la riqueza de una vida entregada a ayudar desinterasadamente a los otros que te necesitan.
Me encantó el enfoque periodistico y también descubrir que grande es la vida con gente como ella.
